A lo mejor no sabes que esa primera página de un libro, la que suele estar en blanco en tapa blanda y de algún color en tapa dura, se llama guarda.
Y que su otra compañera es, precisamente, la última página del libro antes de la cubierta.
Las guardas nacieron en su día para fortalecer la tapa dura y unir la cubierta al texto cosido.
Hoy en día esta técnica se ha mejorado y ya no son de utilidad como antaño, pero siguen siendo una parte decorativa muy interesante en los libros.
Hay personas o editoriales que deciden añadirles un diseño y hacerlas más vistosas.
Pero la realidad es que ahora las guardas se ha quedado como una de las páginas de cortesía que se dejan al principio y al final de los libros.